Al igual que para las personas, los primeros auxilios tienen la finalidad de proporcionar un tratamiento de extrema urgencia en caso de presentarse accidentes domésticos o ciertos imprevistos en la salud de las mascotas. Es importante aclarar que las técnicas que se puedan implementar para asistir a un perro o gato no reemplazan la atención veterinaria en una situación de emergencia, pero si resulta de vital importancia saber cómo actuar para mantenerlo a salvo mientras se espera la presencia de un profesional habilitado, o en caso de ser posible, se traslada a la mascota hasta su consulta. Ante estas situaciones, se debe mantener la calma, no dejarse llevar por el miedo o la desesperación, y actuar con cautela, dado que los animales al estar heridos y sentirse amenazados pueden reaccionar agresivamente e intentar morder a quien se le acerque.
Por eso te brindamos una guía para que sepas como actuar en los casos de emergencia más frecuentes.
Recuerda consultar a tu médico veterinario antes de tomar alguna decisión apresurada.
ENVENENAMIENTOS
Se debe actuar rápidamente ya que el tiempo es fundamental para tratar un envenenamiento. Llamar de inmediato al veterinario y estar preparado para dar los datos y cualquier síntoma que presente el animal. En caso de ser
posible conserve el producto que haya ingerido para ayudar en la identificación.
ASFIXIA
Deben intervenir dos personas, una sosteniendo con firmeza al animal e inmovilizándolo entre sus piernas mientras con las manos abre lo más posible su boca , Y segunda persona trata de remover el objeto atorado.
ATROPELLAMIENTO
Lo primero que se debe lograr es inmovilizar al animal lo mejor que se pueda. Los movimientos bruscos pueden provocar dislocación de huesos o quebraduras, moverlo innecesariamente puede empeorar su condición.
HERIDAS
Si la mascota sufrió alguna herida por causa de otro animal O algún corte, se le debe mantener en algún lugar seguro y tranquilo, lo más quieto posible. Se debe cubrir el área con una gasa o una toalla
limpia y hacer presión en la zona. Si la herida no es sangrante, limpiar con agua limpia.