El dilema acerca de si “la papa engorda o no” proviene de la antigua creencia de que para no aumentar de peso era necesario reducir o eliminar el consumo de alimentos ricos en carbohidratos. Aquí se incluían alimentos como el arroz, las pastas, las papas y otros tubérculos. Investigaciones científicas más recientes han desmantelado dicha teoría, asegurando que, definitivamente, los carbohidratos no son el enemigo.
Sin embargo, muchos de estos mitos alimenticios siguen arraigados en la población, dando lugar a malentendidos y haciendo que la información sea tergiversada.
La papa es un alimento rico en carbohidratos almidonados, con un gran valor nutricional y un aporte energético significativo. Contrario a lo que se pensaba anteriormente, el simple hecho de comer este tipo de carbohidratos no hace que aumentemos de peso, de la misma forma que recortarlos no nos convierte en personas delgadas.
De hecho, la investigación científica ha informado que las dietas bajas en carbohidratos no son la vía más efectiva para controlar o reducir el peso, y que incluso pueden tener el efecto contrario a largo plazo.
El simple hecho de comer papa no engorda. Al igual que con otros alimentos, el aumento de peso en realidad está más relacionado con el tamaño de las porciones.