Con 494 votos, la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad las reformas para prohibir la distribución de comida chatarra en escuelas de educación básica, dicha situación tendrá un gran impacto a vendedores ambulantes, tiendas de abarrotes, entre otros comercios.
Estos alimentos procesados se ha demostrado que son de alto contenido calórico, y que desde hace años se viene
comercializando a las afueras de escuelas públicas y privadas, lo que ha incrementado los índices de obesidad, sobrepeso, diabetes e hipertensión en personas jóvenes; cabe destacar que a los alimentos chatarra se les considera a todo aquellos que no aportan valor nutricional, pero que sí suman calorías, azúcar, sal y grasa saturada, además de conservantes como las sales de nitro y nitritos.
Ante esto se necesita el total compromiso de los padres de familia, directivos y docentes en las escuelas para supervisar que no se distribuya estos productos a menores, por ello autoridades dieron a conocer que se estarán vigilando constantemente los planteles, y aunque esto generará pérdidas a muchos comerciantes la salud de los menores será primero.