CAMPECHE. A la fecha existe más de la mitad de la población que vive en situación precaria, y ante la falta de empleos han dedicado su vida a la recolecta de basura con el fin de llevar unos cuantos pesos a sus familias. Sin embargo, este grupo poblacional no ha roto su rutina ni por la pandemia, y continúan desafiando el virus el cual puede estar entre los restos de comida, plástico, ropa, muebles y objetos varios que los pepenadores exploran sin descanso y en muchas ocasiones sin las medidas sanitarias.
