CAMPECHE. – Desde la administración del ex gobernador Alejandro Moreno Cárdenas y Carlos Miguel Aysa González, la titular de la SSP dio a conocer que al menos 210 cámaras de video vigilancia instaladas por toda la ciudad sólo están de adorno, por lo que es necesario que todas operen en condiciones adecuadas y para ello es necesario con urgencia su mantenimiento.
Pese a que se comprometieron al fortalecimiento en el sistema de video vigilancia para garantizar la seguridad de todos los carmelitas, estas propuestas quedaron en el olvido pues desde que Óscar Rosas llegó solamente les quitó la tranquilidad a las familias carmelitas, pues los asaltos se han disparado a todas horas el día, así como muchos otros delitos que tienen atemorizados a toda la isla.
Sin propuestas serias y responsables que no se tuvieron en materia de vigilancia en la ciudad, las cámaras de video vigilancia han permanecido desde hace meses fuera de servicio y otros con cortos eléctricos, están se encuentran ubicadas en varios puntos de Ciudad del Carmen, las cuales son operadas por el Centro de Control, Comando, Comunicaciones, Cómputo y Coordinación, así lo dio a conocer la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, Marcela Muñoz Martínez, quien dijo desconocer hasta el momento cuantas están en funcionamiento.
De igual forma destacó que tras la visita a los centros o destacamento de la Policía Estatal y Municipal en Carmen, comentó que estos se encuentran en pésimas condiciones, lo mismo que el funcionamiento de las cámaras de video vigilancia, que en el sexenio compartido entre Alejandro Moreno Cárdenas y Carlos Miguel Aysa González, y quienes presumieron que había más de mil cámaras y una inversión de más de 220 millones de pesos.
Sin embargo, la Secretaría de Seguridad Pública ha dejado en claro que está inversión ha servido de poco, pues en el estado la incidencia delictiva sigue en aumento, sobre todo en Carmen que es más bien conocida por los habitantes como la ciudad del crimen, esto tiene sumergida en un miedo profundo a cada carmelita pues se sienten inseguros al transitar por las calles a cualquier hora del día.