CAMPECHE. Ante el desorden provocado por la proliferación de vehículos rotulados como taxis, sin concesión o permisos correspondientes, han venido a afectar la economía de un centenar de familias campechanas quienes dependen de los ingresos de los trabajadores al volante, específicamente en el servicio de taxis.
Sin embargo, esta situación no sólo ocurre en la capital, sino también en los demás municipios del estado, por ello, dirigentes de las
diversas agrupaciones que hay en la entidad pedirán a la gobernadora electa su intervención directa luego de rendir protesta como titular del Poder Ejecutivo.
De igual forma, trabajadores dieron a conocer que alrededor del 40 por ciento de la flota se encuentra en pésimas condiciones y representa un riesgo para el usuario, pero no es todo; en la ciudad hay 22 líneas de taxis en la ciudad que se deben regular y miles de
prestadores del servicio que operan sin permiso alguno, como es el caso de Escárcega.
