CAMPECHE. En temas de inseguridad, Campeche se llevaría el primer lugar, pues a pesar de los más de 220 millones de pesos derrochados en cámaras de vigilancia por parte del sexenio de Alejandro Moreno Cárdenas y que concluirá Carlos Miguel Aysa González en los próximos meses, estas han sido poco eficientes para lograr controlar la delincuencia.
Alrededor de mil cámaras de video vigilancia se encuentran instaladas en distintos puntos de la ciudad, sin embargo, estas solamente estan de “adorno” dado a que la incidencia delictiva en el estado se mantiene con una tendencia hacia alza, sobre todo en ciudades como Campeche y Ciudad del Carmen.
Durante la semana se han registrado más de cuatro asaltos a transeúntes, 12 robos a tiendas de conveniencia, el robo de un vehículo en pleno Centro Histórico de la ciudad, así como varias motocicletas abandonadas con reporte de robo, a pesar de que las cámaras lucen como nuevas estas deberían estar monitoreadas por la policía las 24 horas, sin embargo, ningún delincuente ha sido capturado.
Cabe destacar, que el Gobierno del estado realizó un convenio con la empresa filial del Grupo Altavista, Interconecta,
para la renta de cámaras de vigilancia, dichos equipos también fueron colocados en el municipio de Carmen, en Champotón, en Escárcega, Candelaria, Hopelchén y Calkiní, estas últimas con la adquisición de 200 cámaras en total, con las que se llega a un total de mil 100 equipos en operación en todo el estado, sin que hasta el momento se haya tenido resultados acerca de la eficacia de estas cámaras, y por el que de manera oficial se ha gastado un total de 223 millones 714 mil 797 pesos, sin tomar en cuenta que el gasto de las 200 cámaras del 2018 están en el limbo, otra mancha de desfalco al erario de Campeche.
Habitantes del estado han sido testigos de la imparable delincuencia, y dicen que estos casos ocurren cada vez más debido a la crisis económica provocada por la pandemia, por lo que cuestionan el verdadero propósito de las cámaras de seguridad que en realidad no sirven para nada, aunque exista la tecnología y equipamiento para
luchar contra la delincuencia, esta inversión no se refleja en mayor seguridad en las calles; por otra manifestaron que dudan que muchas de ellas estén en funcionamiento, pues no hay pronta acción policial durante cada suceso.
