CAMPECHE. A pesar de las restricciones que se han desatado a raíz del alza en casos positivos, cientos de empresarios mantuvieron sus expectativas altas para poder sobrevivir a la temporada vacacional en el estado,
sin embargo, durante el fin de semana registraron bajas ventas, pues aunado al aumento de turistas no lograron obtener ganancias.
Lamentablemente, el “verano” significaba buenas ventas, sin embargo, ahora con el Covid-19 la situación se ha tornado complicada y hasta agobiante, pues comerciantes reconocieron que esperaban que su economía
mejorara durante el inicio de las vacaciones, fue evidente el número de visitantes extranjeros al estado, pero estos optaron por pasear por el Centro Histórico o acudir a restaurantes del malecón y de la Plaza Galerías.
Otro sector afectado por la pandemia, han sido los artesanos, pues quedaron en el olvido, y su economía se ha visto muy golpeada pese a la llegada de turistas a Campeche, muchos se han quedado con sus productos realizados a mano, pues no tuvieron mercado para poder venderlas, esto los ha orillado a realizar ofertas a través de las redes sociales y recuperarse un poco para poder sacar el sustento para sus familias.
La realidad ha azotado las esperanzas de trabajadores, quienes se sienten amenazados por la crisis sanitaria, y aunque la afluencia de habitantes y de visitantes ha sido alta en los últimos días, no están obteniendo las ganancias esperadas, muchos locales se ven obligados a cerrar por no poder cumplir con el pago de renta, servicios públicos, o el pago a sus empleados.
La intensa movilización de personas está beneficiando a otros sectores, pero la central de abastos Pedro Sainz de Baranda, así como negocios en el centro de la ciudad, no están recuperándose, sino por el contrario, continúan sumergidos en deudas y problemas, pese a ello siguen implementando las medidas sanitarias necesarias para evitar no sólo el aumento de contagios, sino que sus comercios no sean clausurados pues esto supondría terribles consecuencias para su economía.
