CAMPECHE. Desde la mañana empezó el perifoneo en las calles del antiguo y tradicional barrio de Santa Ana… La expectativa se fue creando… Estaría Ella, la candidata de la esperanza…
A las 6, aunque de bajada, el calor seguía sofocante pero ya decenas se vecinos estaban en sus lugares, sentados, y la animación de Lupita Nagarián los prendía al ritmo de “llegará llegará llegará”, la canción-himno de la campaña
laydista.
A lo lejos, de la principal avenida República que conecta el barrio con la Alameda y el Centro Histórico, se empezó a escuchar el ritmo de la batucada… Cada vez más cerca, cada vez más cerca y al frente Renato Sales Heredia, el candidato a presidente municipal. ¡Ya está aquí!, grita Lupita por el micrófono y los vecinos se paran para recibirlo, generosos.
A esta hora ya es una fiesta guinda en el parque.
Ella, ya en el mitin, repasa con indignación el estado deplorable del sector salud, la falta de médicos y medicinas; la falta de aparatos para la atención y el abandono de hospitales y unidades médicas; las ambulancias tiradas o en trabajos de carga… Eso se acabará porque, en su gobierno, hará una revisión minuciosa del sector.
A cambio, dice con indignación y ante el aplauso de los vecinos, Alito gastaba más en su imagen, en publicitarse. Con el PRI, dice con coraje, nos fue peor que con el covid pues con éste se perdieron 5 mil empleos y con aquél 10 mil.
Los de morena, con el ejemplo de “ya saben quien”, atiende primero a los pobres y lo mejor para los pobres, se pone en los zapatos de los que menos tienen, como había dicho antes el candidato Sales Heredia.