Alemania prohibirá la trituración de pollitos recién nacidos por parte de las granjas de gallinas ponedoras a partir de 2022.
En Alemania, unos 45 millones de pollitos machos recién salidos del cascarón son sacrificados sistemáticamente cada año porque carecen de utilidad en granjas productoras de huevos. Esta práctica criticada en nombre del bienestar animal, se lleva a cabo porque los criadores consideran que al ser más pequeños que las hembras, se consideran demasiado costosos de criar y poco rentables para su destino a consumo como carne.
Con este proyecto de ley aprobado el miércoles por el gobierno de Angela Merkel, Alemania se presenta como pionera en esta cuestión.
La ministra de Agricultura, Julia Klöckner, dijo que Alemania es el primer país en el mundo en tomar medidas tan claras, respecto a lo que calificó como una “práctica poco ética”, y señaló que esta iniciativa es un “avance significativo para el bienestar de los animales”.
Ahora, en las próximas semanas el parlamento tendrá que aprobar la ley.
Para sustituir el sacrificio sistemático de los pollitos machos, esta nueva ley prevé que se generalicen los métodos de sexaje de los huevos para destruir los huevos machos antes de la eclosión
En la actualidad, estos datos permiten determinar el sexo del embrión del huevo entre el noveno y el decimocuarto día de incubación, de un total de 21.
Asimismo, la nueva ley apoyará las técnicas innovadoras con el objetivo, a partir de 2024, de poder determinar el sexo antes del sexto día de incubación, con el fin de “mejorar aún más el bienestar de los animales”.
Ya que para el 59% de los alemanes, la cuestión del bienestar de los animales es importante o muy importante a la hora de elegir a su candidato en las elecciones locales o nacionales, según una encuesta de 2019 de la asociación de defensa de los animales PETA.