CIUDAD DE MÉXICO. Se disputaba la fecha 7 del futbol de Portugal, en la cancha se enfrentaban el Portimonense y el Sporting de Lisboa, cuando un terrible accidente se suscitó en el arco que defendía el guardameta francés Romaín Salin. Dicha suceso pudo acabar en tragedia, afortunadamente el uruguayo Sebastián Coates reaccionó a tiempo para salvar la vida de su compañero.
La acción se generó mientras transcurría el primer tiempo, en la segunda anotación de los locales, el francés se lanzó para intentar evitar la anotación, sin embargo, no lo logró y al caer se golpeó fuertemente en rostro ocasionando que se desmayara.
Afortunadamente Coates se percató de la situación y corrió a auxiliarlo; metió sus dedos en la boca de su compañero para evitar que se asfixiara con su propia lengua, momentos después los médicos llegaron para atenderlo.
El guardameta abandonó el terreno de juego y fue trasladado a un hospital cercano para realizarle estudios que determinarían su estado de salud.