Una fuerte movilización policiaca se originó ayer en el Centro Histórico del Carmen, cuando una familia pidió auxilio ya que unos hombres entraron a su vivienda para correrlos, ya que sus muebles iban a ser asegurados y ellos tenían que salir de la residencia.
La gente que entró a su casa les advirtió que estaba embargada.
El hecho se registró ayer a las 2:30 horas, en la calle 26 entre calles 41 y 43 del centro de la ciudad.
Incluso afuera de la residencia había camiones y cargadores, que iban a empezar a acarrear los muebles e inmuebles de la residencia a las unidades vehiculares.
Juan Enrique Campos Barredo, padre de Ana Lilia Campos Graniel, esta última propietaria de la residencia, dijo que, demostraron a las autoridades periciales de México y de Ciudad del Carmen, que están al día en el pago de todo y no deben nada a nadie.
El personal de abogados y peritos de México y de Ciudad del Carmen aunque no pidieron disculpas a la familia, reconocieron que se equivocaron rotundamente, dijo Campos Barrero.
Juan Enrique Campos Barredo opinó que, quien sabe quién sea la familia carmelita a quien vinieron a embargar y cuál sea el motivo, que a él ni le interesa. Lo que sé que ellos, los que iban a embargar la casa, cometieron los delitos de allanamiento de morada, entra otras cosas.
Gracias Dios que llegó la autoridad y se esclareció que la familia Barredo fue confundida por otra familia a quienes iban a embargar.
