CAMPECHE, CAMP. Con historias, juegos y mucha escucha, los pasillos de la primaria “Fidel Velázquez Sánchez” se llenaron de algo más que tareas y recreo: esta semana, la prevención se sentó en cada pupitre. Personal del Centro Comunitario de Salud Mental y Adicciones de Campeche (CECOSAMA) impartió un taller sobre manejo de emociones, una herramienta clave para frenar desde la infancia el consumo de sustancias psicoactivas.
No fue una charla cualquiera. Fue una conversación abierta sobre cómo sentirse triste, enojado o frustrado… y qué hacer con todo eso sin recurrir a la violencia ni a las drogas. Los niños aprendieron que las emociones no son el enemigo, y que hablarlas es parte del aprendizaje de la vida. Con ejemplos sencillos y dinámicas adaptadas a su edad, se les explicó cómo identificar lo que sienten, cómo expresarlo y cómo pedir ayuda.
Mientras tanto, en otro frente igual de crucial, estudiantes del sexto cuatrimestre de Psicología de la Universidad Vizcayarecibieron capacitación especializada por parte del mismo personal de Cecosama. Ahí, se les entrenó en prevención, detección y abordaje de adicciones: desde cómo reconocer los distintos tipos de sustancias y su impacto, hasta aplicar pruebas específicas que detectan signos tempranos de consumo o alteraciones emocionales como depresión y ansiedad.
Estas actividades no son eventos aislados. Se enmarcan en una estrategia estatal que busca frenar un problema que comienza a temprana edad y que suele estar alimentado por la falta de acompañamiento emocional. Por ello, Cecosama ha intensificado sus visitas a las escuelas, entendiendo que el aula no solo es para aprender matemáticas, sino también para sanar y prevenir.
