Ucrania lanzó un ataque contra la región rusa de Briansk utilizando misiles balísticos de largo alcance ATACMS, fabricados en Estados Unidos, según confirmaron fuentes oficiales de ambos países. Este ataque, el primero registrado con este tipo de armamento, marca una escalada significativa en el conflicto.
El Ministerio de Defensa ruso informó que, sus sistemas de defensa derribaron cinco de los seis misiles lanzados, mientras que uno impactó en una instalación militar en Briansk. Según Moscú, el ataque no dejó heridos ni daños materiales importantes.
En contraste, el Estado Mayor ucraniano reportó un ataque exitoso contra un arsenal ruso en la misma región, aunque evitó detallar el tipo de armamento utilizado. Una fuente ucraniana, bajo
anonimato, confirmó a la agencia AFP que el ataque fue realizado con misiles ATACMS, lo que refuerza la teoría de que Kiev ya dispone de estas armas autorizadas por Washington.
CONTEXTO DEL USO DE ATACMS
Cabe destacar que, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, habría dado luz verde a Ucrania para emplear estos misiles contra objetivos en territorio ruso, inicialmente limitando su uso a regiones fronterizas como Kursk, donde Rusia ha concentrado tropas y, según informes, efectivos norcoreanos. No obstante, el ataque en Briansk sugiere una ampliación del alcance táctico ucraniano.
Por su parte, el presidente ucraniano, Volodímir Zelensky, al ser consultado sobre el uso de los ATACMS, declaró que su país tiene estos misiles a disposición y está decidido a utilizarlos, sin confirmar si el reciente ataque fue con este armamento.
RESPUESTA RUSA
En un movimiento de respuesta, el presidente ruso, Vladímir Putin, aprobó una nueva doctrina nuclear que contempla el uso de armas atómicas en caso de ataques convencionales contra Rusia. Esta decisión, anunciada el mismo día del ataque, subraya el aumento de tensiones entre Moscú y Kiev, con implicaciones globales.
