MÉXICO.- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha respondido a las acusaciones que ha enfrentado en las últimas semanas sobre posibles vínculos con el narcotráfico, incluyendo los señalamientos de la periodista Anabel Hernández en su reciente libro “La historia secreta: AMLO y el Cártel de Sinaloa”.
En su conferencia de “La Mañanera”, repasó los eventos relacionados con la “campaña” en su contra, surgida tras la publicación de artículos que insinuaban supuestos lazos con organizaciones criminales para financiar su campaña en 2006. Afirmó que, estos artículos se basaron en una investigación de la DEA, la cual, no arrojó conclusiones definitivas y se sustentó en testimonios anónimos.
El mandatario también mencionó el lanzamiento de un nuevo libro de Anabel Hernández, que se basa en esta investigación. En este contexto, solicitó pruebas que respalden las acusaciones vertidas en contra suya durante su candidatura en 2006, sugiriendo que el propósito del libro de la periodista es meramente difamatorio.
Ante la presentación del libro de Anabel Hernández, que plantea la pregunta “¿Quieres saber por qué López Obrador abraza a los narcos?”, el presidente retó a la periodista a presentar pruebas.
López Obrador recordó la aparición de hashtags como #NarcoPresidenteAMLO después de los reportajes de ProPublica y The New York Times, y culpó a publicistas extranjeros vinculados a agencias como la CIA y la DEA.
Señaló que esta “campaña” se inició tras la publicación del reportaje de Tim Golden para ProPublica, que sugiere un supuesto financiamiento del narcotráfico a su campaña presidencial de 2006.
Sin embargo, el presidente criticó que desde la publicación de dicho reportaje no se ha obtenido más información al respecto.
López Obrador expresó su desconfianza sobre la credibilidad de estos reportajes y sugirió que el periodista detrás de ellos podría haber sido influenciado para realizar un trabajo con información de la DEA.
ENTÉRATE
Expresó su desconfianza sobre la credibilidad de estos reportajes y sugirió que el periodista podría haber sido influenciado para realizar un trabajo con información de la DEA.
