SALUD.- El incremento significativo de enfermedades transmitidas por mosquitos, en particular el dengue, se ha convertido en una seria amenaza para la salud pública en México y en todo el mundo.
Las autoridades sanitarias han expresado su preocupación debido al aumento del 325 por ciento en los casos de dengue en México en comparación con el año anterior.
La Secretaría de Salud federal reportó que, hasta el 13 de noviembre, se han registrado 44 mil 257 casos de dengue en 2023, con 132 fallecimientos, en comparación con los 10 mil 411 casos y 29 fallecimientos para la misma fecha en 2022.
El 67 por ciento de los casos confirmados se concentran en los estados de Yucatán, Veracruz, Quintana Roo, Morelos y Puebla.
La reciente catástrofe del huracán “Otis” en Guerrero ha levantado preocupaciones adicionales, ya que se teme que genere un aumento significativo en los casos de dengue debido al agua estancada y la falta de agua potable, condiciones propicias para la proliferación de mosquitos portadores del virus.
Sofía Sánchez Piña, investigadora de la Facultad de Enfermería de la UNAM, alertó sobre un posible incremento alarmante de 100 casos diarios adicionales en la región afectada por el huracán, lo que agravaría aún más la situación.
Los síntomas del dengue incluyen fiebre elevada, dolores intensos de cabeza, musculares y articulares, náuseas, vómitos y salpullido, apareciendo de 4 a 10 días después de la picadura del mosquito infectado.
Este problema no se limita a México: en América Latina, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) alertó sobre la incidencia más alta registrada de dengue en 2023, con 3.1 millones de casos. Brasil representa el 80 por ciento del total, y se han observado aumentos inusuales en áreas como la región andina, con más de 400 mil casos y una tasa de letalidad más alta.
