Debido a que Estados Unidos y Europa disponen de reservas estratégicas de vacunas, los casos de viruela símica han ido disminuyendo, sin embargo, la Organización Mundial de la Salud reiteró que aún hay alerta máxima y no hay que relajar las medidas.
Entre las precauciones que reiteró la OMS a la población está el evitar contacto piel con piel, usar cubrebocas, lavarse las manos con agua y jabón, en el caso de infectarse del virus mantenerse aislado, cubrir las erupciones y no compartir ropa u otros objetos personales.
Al igual que el Covid-19 con la reducción de casos que ha tenido, está sucediendo lo mismo con la viruela del mono; sin embargo, ambos virus tienden a evolucionar, lo cual enciende las alarmas pues será complicado contener la propagación pues en cualquier momento podrían volver a aumentar.
Cabe destacar que, aunque no hay decesos ni hospitalizaciones graves, existen motivos de inquietud pues el virus podría propagarse más rápido ya que podrían surgir nuevas variantes, los casos podrían darse en grupos vulnerables, así como la falta de inoculación en algunas partes del mundo.
La población se encuentra en riesgo y no es tiempo para cantar victoria, en especial aquellos grupos vulnerables como pacientes con VIH, con sistema inmune debilitado como menores de edad, adultos mayores o con alguna comorbilidad.
ENTÉRATE
Las mismas precauciones para combatir el coronavirus, serán esenciales para combatir otros virus respiratorios como la influenza o resfriados comunes.
