En medio de una crisis climática que azota al país, el campo mexicano enfrenta una dura realidad: la sequía prolongada que ha afectado a estados clave como Sinaloa, Jalisco y la región del Bajío. Sin embargo, Julio Berdegué, titular de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural Sader), asegura que el abasto de maíz blanco está garantizado para 2025, disipando temores sobre un posible desabasto o la necesidad de recurrir a importaciones.
Cabe destacar que, la Sinaloa, conocido como el granero de México, enfrenta un escenario difícil.
La sequía ha reducido significativamente la superficie destinada a la siembra de maíz blanco. Según Berdegué, “es cierto que Sinaloa, al igual que otros estados como Sonora, Chihuahua y Coahuila, ha permanecido en una condición de profunda sequía”.
Sin embargo, subrayó que, aunque la producción disminuirá, las cosechas en el centro del país, particularmente en Jalisco y el Bajío, ayudarán a equilibrar el abasto nacional. Además, aclaró que gran parte del maíz producido en Sinaloa en años normales se destina al consumo animal. “Podríamos perder la mitad de la cosecha de Sinaloa, pero el maíz destinado al consumo humano estará garantizado.
No faltará ni un grano de maíz blanco para la industria de la harina, la masa y la tortilla”, afirmó.
ESTABILIDAD GARANTIZADA
En respuesta a las inquietudes sobre un posible incremento en el precio de la tortilla, Berdegué fue tajante: “Hay suficiente maíz blanco; no habrá alzas de precio por falta de este grano básico”.
Además, destacó que el Gobierno ha implementado programas para mitigar los efectos de la sequía y fortalecer la soberanía alimentaria.
En un contexto de sequías recurrentes, voces críticas han cuestionado la prohibición del maíz transgénico en México.
No obstante, Berdegué reafirmó la postura gubernamental de prohibir su cultivo. “No necesitamos maíz transgénico para garantizar nuestro abasto. México ha logrado producir suficiente maíz blanco sin recurrir a transgénicos, y eso no cambiará”, sostuvo.
COSECHANDO SOBERANÍA
El gobierno federal ha lanzado el programa Cosechando Soberanía, diseñado para apoyar a pequeños y medianos productores con asistencia técnica, créditos y medidas para mejorar la comercialización. Este sector, que produce el 85% del maíz blanco en el país, es una prioridad.
“Los pequeños y medianos productores son el pilar de la producción de maíz blanco en México. Por eso, la tecnificación del riego es clave. Cada hectárea tecnificada aumenta en un 50% la productividad”, explicó el funcionario.
