CDMX. En un año electoral marcado por cambios profundos en el panorama político y mediático del país, no solo la coalición entre el PRI y el PAN sufrió un descalabro histórico en las urnas. El llamado “annus horribilis” alcanzó también a sectores que durante décadas fueron pilares del régimen conservador, como el duopolio televisivo, la élite intelectual de derecha, las encuestadoras de dudosa reputación y otros beneficiarios del antiguo sistema.
El 2 de junio de este año, el respaldo masivo de casi 36 millones de ciudadanos al proyecto encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo no solo significó un triunfo electoral para MORENA y sus aliados; también marcó un punto de inflexión para la oposición, cuyos líderes, Marko Cortés y Alejandro “Alito” Moreno, optaron por separarse tras la derrota.
Peor aún, el PRD perdió el registro que alguna vez heredó del Partido Comunista.
RESACA
Pero la resaca electoral no se limitó al ámbito político. En los medios tradicionales, como Televisa y El Universal, comenzaron a verse reajustes significativos, mientras que plataformas digitales como Atypical TV, encabezada por el publicista Carlos Alazraki, cobraron protagonismo, aunque no sin polémica.
