Luego de que representantes de la Policía Federal anunciaron que la corporación desaparecerá en 18 meses, y que se negociaba que los elementos laboren en otras áreas, siempre respetando sus derechos laborales, la mayoría de los uniformados mostró su molestia y desconocieron a los voceros.
Antes de ser desconocidos, los representantes resaltaron que tras la reunión con el subsecretario de Seguridad, Ricardo Mejía Bermeja, en el Centro de Mando, ubicado en Iztapalapa, se les anunció que los que no quisieran pertenecer a la Guardia Nacional podrían ir a las áreas de “aduanas, migración, refugiados, antisecuestros, sistemas penitenciarios, policía de seguridad pública y otro cuerpo que es de búsqueda y rescate”.
En el mensaje también se detalló que el sábado se daría el cálculo de la liquidación que recibirán los elementos que no quisieran continuar en seguridad pública, ya que se tendría que consultar con la Secretaría de Hacienda y la Secretaría del Trabajo.
Sin embargo, y pese a la explicación detallada de los representantes, la mayoría de los elementos de la Policía Federal ubicados en el Centro de Mando rechazaron la información, desconocieron a sus voceros y los llamaron “vendidos”.
Con información de Excélsior