CALKINÍ. Luego de que sus ideales fueran, no robar, no mentir, no traicionar, el actual presidente municipal, José Emiliano Canul Aké hizo todo lo contrario, pues desde que se traicionó al partido que lo puso en el poder, hizo de todo para dejar al municipio de Calkiní en bancarrota.
Abandono y miseria es lo que deja el gobierno ex Morenista, quien solo se dedicó a los viajes de placer a México bajo el argumento de que iba a gestionar obras, las cuales nunca fueron vistas por los ciudadanos, pues las condiciones en las que se encuentran sus comunidades demuestran la falta de experiencia que tenía al estar frente a la alcaldía la cual le quedó muy grande.
Gustavo Caamal Pérez, ex líder del PRD y Felipe Villanueva, desde tiempo atrás han lamentado el total abandono en que se encuentra Calkiní, con gente viviendo en la pobreza extrema, con pisos de tierra y carente de servicios de energía eléctrica, como el barrio de San Mateo, prácticamente nulos.
Aunado a ello, la falta del vital líquido en las colonias fue la problemática que más reclamaron los ciudadanos, y por la que más se manifestaron sin embargo si la cobraron y con aumentos año con año.
A unos días de que esta administración termine, las carencias en el municipio son muy notables pues debido a la falta de gestión del alcalde Canul Aké, las unidades de la policía se les veía sin gasolina lo cual hizo que aumentara la inseguridad.
