Elegir un perro no es una decisión fácil, ya que todos son adorables, sin importar que sean o no de raza. Sin embargo, se debe tomar en cuenta la rutina de la familia para que la mascota se adapte al día al día. Otros factores relevantes son el tiempo que se tiene para educarlo y sacarlo a pasear y los cuidados que requiere.
Razas a elegir
• Maltés. Se caracterizan por su tranquilidad. Su pelaje blanco es muy llamativo, son activos y muy cariñosos. Les gustan las caricias y son perfectos acompañantes. Les encanta el juego y son muy divertidos. Aunque se trata de una raza pequeña, clasificada como miniatura, es un perrito fuerte y con larga expectativa de vida.
• Beagle. Se adaptan bien a cualquier entorno, poseen mucha energía y todo el tiempo quieren jugar. Son una compañía ideal para los niños debido a su hiperactividad. Les gusta mucho el deporte, y a cualquier hora están dispuestos a realizarlo. Su tamaño es mediano y su pelo corto. Les encantan los juguetes y estar acompañados.
• Bóxer. Es una raza muy noble y fiel con las personas, sobre todo con los miembros de su familia. Se la llevan muy bien con los niños y son respetuosos con los adultos mayores. Fuertes y leales, suelen ser deportistas, y con otros perros tienen un carácter dominante. Son de tamaño mediano y con el pelo corto. Se adaptan fácilmente.
• Bulldog inglés. Son dóciles, amigables, tolerantes, y pacientes con los niños. Son muy inteligentes y pueden adaptarse a cualquier entorno. No necesitan realizar demasiada actividad física, por lo que son apropiados para familias pasivas. Su tamaño es mediano, y son ideales para las familias que presten una especial atención a sus mascotas.
• Criollo. Se adaptan a cualquier entorno, son muy amorosos y leales con niños y adultos. Genéticamente son más resistentes a muchas enfermedades, ya que son el resultado de mezclas entre razas. Su inteligencia y capacidad de demostrar lo que sienten sorprenden muchas veces a sus familiares. Aprenden rápido.