Si después de cocinar el lugar ha quedado impregnado de olor a comida, puedes poner en práctica sencillos trucos para eliminar los aromas.
Aromatizantes:
»» Naranja y cera de vela. Los materiales que necesitamos son una naranja, esencia y una vela grande. Para hacer este aromatizador corta la naranja por la mitad, retira la parte interior de la naranja y deja la piel. Después, deshazte de la vela en el fuego, y una vez fría ponla en la piel de la naranja con unas gotas de la esencia que más te guste.
»» Agua, gelatina, sal, colorante, esencias y un envase. Calienta en el fuego el agua con la gelatina y la sal. Después le añades el colorante y la esencia.
»» Colgante con flores de papel. Para realizar este colgante necesitamos: hojas de papel, pegamento, cordón y ambientador. Corta todas las hojas de papel del mismo tamaño y veles dando forma de hoja. Después pega las hojas unas a otras hasta tener forma de flor grande, en el interior coloca una bolsita con hierbas o un ambientador casero.
»» Suavizante. Calienta agua en una olla y pon unas gotitas de suavizante, ya verás que al poco rato tu cocina olerá a suavizante, y no quedará ni rastro del mal olor.
»» Aprovecha el calor de los focos. Frota las bombillas cuando están apagadas con unas gotitas de perfume o colonia, en cuanto enciendas la luz de casa, el aroma a perfume se desprenderá en toda la estancia.
»» Si quieres que tus armarios huelan siempre a limpio, introduce en una bolsita con un poco de bicarbonato y unas gotitas de esencia o perfume, para que huela a limpio por mucho tiempo.
