CAMPECHE, CAMP. El silencio de los pasillos escolares puede ser engañoso. Entre risas y pasos apurados, algunas voces jóvenes esconden crisis profundas. Ante esta realidad, la Secretaría de Educación presentó un protocolo de prevención y contención ante suicidios, después de registrarse cuatro intentos de suicidio por parte de adolescentes en lo que va del año. La medida busca intervenir a tiempo, acompañar a los estudiantes y proteger al personal escolar.
Víctor Sarmiento Maldonado, secretario de Educación, relató que el protocolo se construyó con cuidado, revisado por la Secretaría de Salud, defensores de menores y expertos en derechos humanos. “Lo importante es la contención y la prevención, pero cuando ya no se puede, también debemos atender al grupo donde ocurrió el fenómeno”, explicó.
El protocolo busca actuar desde la prevención y la intervención temprana, por ello se sigue capacitando a docentes para responder adecuadamente y sensibilizarlos sobre la salud emocional. Cuando se detecte a un adolescente con estos indicios, se ofrece de inmediato apoyo psicológico, seguimiento personalizado y acompañamiento en su proceso de recuperación.
Sin embargo, Sarmiento Maldonado, reiteró que la medida no termina ahí, ya que también se atiende al personal docente y compañeros, para minimizar el impacto emocional dentro de las aulas. De esta manera, las escuelas cuentan con un plan integral que combina prevención, atención y contención, buscando que todos reciban cuidado y protección cuando más lo necesita.
Cada detalle del documento fue afinado para garantizar que la atención sea humana, respetuosa y segura, cuidando tanto el cuerpo como las emociones de los estudiantes. Con esto, se apuesta a que la prevención sea la primera línea de acción, y que cada escuela sea un espacio donde las emociones puedan expresarse sin riesgo, donde la atención sea inmediata y donde cada joven se sienta acompañado, escuchado y protegido.
