CAMPECHE, CAMP. Las reservas federales de Balamkú y Balamkín presentan graves afectaciones por deforestación e invasiones, y la falta de árboles ya ha repercutido directamente en la fauna de la región, alertó Jocelyn Durán, titular de la SEMABICCE, ante el Congreso local.
Durán explicó que en la reserva de Balamkú muchas especies de árboles desaparecieron, incluyendo el salam, caoba y el granadillo, dejando zonas donde la vegetación es escasa y la fauna prácticamente ha desaparecido.
“Es un problema que se ha mantenido oculto por años, sin estudios claros, y la extracción constante de madera hacia Yucatán ha dejado sitios defaunados y sin árboles de gran diámetro”, señaló la funcionaria.
Para frenar los daños, el gobierno mantiene cuatro casetas de vigilancia con 17 guardabosques trabajando de manera permanente. Además, destacó que ya se implementan acciones de restauración, control y monitoreo para recuperar la biodiversidad que aún persiste en estas reservas.

