CAMPECHE, CAMP. Una ráfaga de colores, sonidos y aromas descendió sobre Campeche desde el 20 de junio, esto por la “Guelaguetza” que volvió al estado, esa herencia viva de Oaxaca que no solo se muestra, se siente. Por lo que hasta el 6 de julio, llenará el Parque Campeche en la avenida Miguel Alemán al ritmo de sones, risas, tlayudas y danzas.
Ante esto, el director del grupo organizador, Alberto Vásquez Sánchez, manifestó que espera la presencia de campechanos, para que se deslumbren con cada bordado, con cada artesanía y trajes típicos que brillarán como vitrales bajo el sol campechano que representan los 570 municipios y las 8 regiones de Oaxaca.
Pero no solo eso, ya que las canchas a un paso del “Casino de Campeche”, quedarán impregnadas de maíz tostado, mole espeso y chocolate caliente que sin duda atrapará a cada campechano. “Venimos a compartir, no a vender. Esto es Guelaguetza: es tequio, es ofrenda, es corazón”.
MÚSICA INUNDARÁ LOS SENTIDOS
Campechanos sin duda recibirán a este estado por otro año consecutivo con los brazos abiertos, ya que también habrá diversas actividades artísticas. Un abrazo musical que se dará con la trova yucateca y los artistas campechanos, que acompañan con guitarras y voces este mestizaje sonoro.
Está “La Zandunga”, “La Llorona”, “Dios Nunca Muere” y la canción Mixteca. Están los danzantes que giran con fuerza y las mujeres que caminan como flores andantes. La cita cierra el 6 de julio con una gala cultural en la que participarán las ocho regiones de Oaxaca, en un estallido final de música ancestral, trajes de gala, faldas al vuelo y sones que se niegan a morir.
Y no, no es solo una feria. Es una cátedra viva sobre identidad, sobre comunidad, sobre lo que significa dar sin esperar, bailar sin miedo, y ofrecer lo que uno es sin reservas. Es la Guelaguetza, y este año, también es campechana.

