CARMEN, CAMP.- “La situación no admite más excusas ni aplazamientos. Exigimos (presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo) su intervención inmediata y efectiva para resolver esta emergencia que amenaza la viabilidad de cientos de empresas proveedoras de Pemex, pieza clave para el desarrollo de la industria energética, del empleo y del país”.
Así lo expresan desesperados, presidente de los organismos que integran el Consejo Coordinador Empresarial de Carmen (CCE), encabezados por su presidente, Encarnación Cajún Úc, al hacer un llamado de auxilio a la titular del Poder Ejecutivo Federal, para evitar el cierre de empresas y miles de desempleados más.
En una carta enviada la presidenta, Claudia Sheinbaum Pardo, en la que señalan que han pasado más de dos años de atrasos sistemáticos en los pagos de Pemex a sus proveedores, situación que se vuelve insostenible y que ha sido reconocida públicamente en sus conferencias matutinas, en donde anunció a saldar la deuda en los meses de diciembre de 2024, así como enero y febrero del presente año. Posteriormente, el plazo se extendió a marzo, confirmada por el director general de la petrolera nacional, Víctor Rodríguez Padilla, el 10 de marzo.
Aseguran que confiaron en la palabra del funcionario, en que marzo sería la fecha límite para regularizar los pagos de Pemex a proveedores, pero a dos meses de distancia “seguimos en espera que se cumpla con el compromiso.”
Indican que esta situación, deja a cientos de empresas al borde del colapso operativo y financiero, así como a miles de familias en una situación crítica. “Es un golpe directo a pueblo, al trabajador, a la gente que depende de esta industria para llevar el sustento a su casa. ¿Cuántas veces más se va a patear el problema?, ¿Cuánto más tenemos que esperar para que se dé cumplimiento al proceso contractual de pago de nuestros trabajos ya ejecutados?, ¿Cuándo se va a normalizar el recurrente atraso de pagos a los proveedores?” Reconocen que se han presentado pagos a proveedores, pero que estos son abonos insuficientes para revertir la crisis y mucho menos, para estabilizar la operación de las empresas afectadas lo que prolonga la incertidumbre financiera y operativa del sector.”
Sostiene que el grueso de los proveedores y subcontratistas siguen sin recibir el pago por trabajos realizados desde hace meses, lo que impacta en la retribución al esfuerzo diario de los colaboradores y la cadena productiva que está al borde del colapso. “Basta ya de discursos optimistas desde el podio. Lo que necesitamos no son datos aislados, sino hechos. Hechos que no han llegado.”
