MÉXICO– Claudia Sheinbaum Pardo, presidenta electa de México, se une a un selecto grupo de mujeres que han roto el techo de cristal en América Latina, una región donde el machismo ha prevalecido por generaciones. Con su victoria del 2 de junio de 2424, se convierte en la novena mujer en liderar un país latinoamericano mediante el voto popular, continuando un legado que comenzó con figuras como Violeta Chamorro en Nicaragua y Michelle Bachelet en Chile.
La llegada de Sheinbaum Pardo a la presidencia marca un punto crucial en la historia política de México, un país donde, hasta hace poco, la posibilidad de una presidenta parecía lejana.
Cabe recordar que, en enero de 2022, Xiomara Castro, tras tres intentos fallidos, logró finalmente su victoria en Honduras con 51 por ciento de los votos, enfrentando obstáculos como el fraude electoral y la represión violenta. Aún en ese contexto, muchos sectores en México consideraban que el país no estaba listo para elegir a una mujer como presidenta.
Sin embargo, en las elecciones internas, hacia finales de 2023, la realidad superó las expectativas.
Tanto la coalición morenista como la oposición en México eligieron a mujeres como sus candidatas principales, y el país finalmente se alineó con la tendencia que había dominado otras naciones latinoamericanas.
De hecho, el 87 por ciento de los votantes optó por una mujer, y Sheinbaum logró un contundente 60 por ciento de los sufragios.
NUEVO AMANECER EN LA POLÍTICA LATINOAMERICANA
El ascenso de Sheinbaum Pardo no solo tiene resonancia en México, sino que representa una continuación de una nueva era para las mujeres en el poder en América Latina.