MÉXICO- El circo político en el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Partido Revolucionario Institucional (PRI) ha comenzado nuevamente, con la designación de Graciela Ortiz González como dirigente nacional interina. Este movimiento sigue a la salida de Alejandro “Alito” Moreno, quien se prepara para su reelección, dejando el “changarro” en manos de Ortiz.
Al lado dejan a los priistas de cepa, para dejar en manos de sus allegados la dirigencia nacional. La decisión fue respaldada por la Comisión Política Permanente del PRI, que aprobó la separación de Moreno y de Carolina Viggiano, la secretaria General del partido. Ambos dirigentes abandonan sus cargos con la intención de participar en el proceso interno de renovación del PRI para el periodo 2024-2028.
El calendario marca el registro de aspirantes para el 22 de julio y el inicio de las campañas el 24 de julio, culminando el 10 de agosto.
Graciela Ortiz, originaria de Chihuahua, es de las incondicionales de “Alito”. Su trayectoria dentro del PRI le ha valido la confianza de la militancia. Ha ocupado roles cruciales como secretaria Técnica del Consejo Político Estatal, secretaria de Acción Electoral del CEN, presidenta del Comité Directivo Estatal y subsecretaria de Capacitación en el CEN.
