MÉXICO.- Bajo la dirigencia de Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas, el PRI ha experimentado una serie de derrotas históricas y ha visto una drástica reducción del 79 por ciento de su militancia. A pesar de estos fracasos, el partido ha manejado cantidades inéditas de recursos públicos multimillonarios.
Los fracasos han sido tan graves que este año el PRI estuvo a punto de perder su registro como partido político local en Tabasco. Este estado, gobernado por el PRI durante 65 años (1947-2012), vio al partido obtener sólo el 3.22 por ciento de los votos en las elecciones para diputados locales el pasado 2 de junio, apenas por encima del tres por ciento necesario para mantener su registro.
A nivel nacional, en 19 estados el PRI no logró superar el 10 por ciento de las preferencias electorales Los resultados más bajos se registraron en Tabasco (3.22 por ciento), Tamaulipas (4.35 por ciento), Baja California (4.71 por ciento) y Morelos (5.44 por ciento).
En las elecciones presidenciales del 2 de junio, el PRI tuvo su peor desempeño histórico, ubicándose como la cuarta fuerza política detrás de Morena, PAN y Movimiento Ciudadano. El partido perdió 1.9 millones de votantes entre las elecciones presidenciales de 2018 y 2024, pasando de 7.6 millones de votos (13.5 por ciento) a 5.7 millones (9.5 por ciento).
Desde que Alejandro “Alito” Moreno asumió la presidencia del PRI en agosto de 2019, el partido ha perdido considerablemente su poder territorial. De las 12 gubernaturas que tenía en 2019, en 2021 perdió ocho y hoy sólo conserva dos: Coahuila y Durango.
