MÉXICO.- La presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, ha dejado clara su visión para el futuro de México: un país con una infraestructura robusta y una sociedad más justa e inclusiva. En su reciente anuncio, reafirmó su compromiso con la continuidad y expansión de proyectos clave, como el Tren Maya y el tren interoceánico, además de la ambiciosa meta de construir tres mil kilómetros de vías férreas durante su sexenio.
La intención de fortalecer la infraestructura del país no solo es una apuesta por el desarrollo económico y la conectividad, sino también una señal de continuidad y estabilidad. Estos proyectos no son solo obras de infraestructura, sino símbolos de un México en movimiento, un país que mira hacia el futuro con determinación y optimismo.
La red de trenes de pasajeros promete transformar la movilidad, fomentar el turismo, y dinamizar las economías locales a lo largo de sus trayectos. Sheinbaum Pardo destacó que ya está en contacto con los gobernadores electos para trabajar en estos y otros proyectos. La colaboración con los líderes estatales será crucial para asegurar que los planes nacionales se integren adecuadamente con las necesidades y potencialidades locales.