CAMPECHE. Las familias conversan tranquilamente entre sí mientras lo realizan la limpieza de los huesos, que es una costumbre y un ritual para la bienvenida, también preparan las flores y velas para adornar el nicho, donde no pueden faltar los bellos paños bordados o pintados con flores y el nombre del difunto, sobre el que reposarán los huesos limpios y que permitirá retirar el usado el año anterior.
“Con la limpieza es como si se les bañara y con el nuevo paño es como cambiarles la ropa, porque están a punto de venir de visita y tienen que estar preparados. Las veladoras se ponen para que vean el camino y puedan regresar con nosotros”, cuentan los lugareños quienes trabajan pintando los nichos y limpiar los huesos de uno de sus amados seres que ya no están en este mundo.
A algunos vecinos, sin embargo, les resulta duro ocuparse personalmente de limpiar los huesos de sus familiares, por lo que piden ayuda a personas o al sepulturero del cementerio.
Con asombrosa rapidez y tranquilidad, los que tienen practica limpia de manera mecánica el conjunto de huesos de quien se lo pide en menos de 15 minutos. Uno a uno, va retirando el polvo de cada hueso con ayuda de una brocha y los vuelve a depositar en su caja sobre el paño nuevo.
“El orden para limpiarlos es como si ellos estuvieran parados (de pie), de abajo para arriba. Por eso a los lados de la caja van las costillas, luego los huesos de pierna y brazos, y lo último es el cráneo que va arriba en el centro. El cabello, como ve, nunca se pierde”, relata el sepulturero haciendo la labor de limpiar los huesos.
La costumbre cuenta que al menos deben pasar tres años desde la muerte de la persona para poder realizar la primera limpieza de huesos, una vez que el cuerpo se ha descompuesto.
Los extranjeros observan el ritual en silencio mientras graban y escuchan los relatos. Hay muchas localidades en la zona con tradiciones similares, pero es Pomuch la que atrae más atencion de turistas, especialmente desde que su práctica fue nombrada Patrimonio Cultural Intangible del estado de Campeche en 2017.
ENTÉRATE
El Día de Muertos asomando parte de sus cráneos desde sus cajas como símbolo de que “están en vigilancia, pendientes de nosotros con su mirada al frente y viendo hacia nuestro mundo”
