MÉXICO.- Silvano Aureoles Conejo no se fue limpio de la gubernatura de Michoacán. Y si no se le ha requerido a que rinda cuentas ante la justicia, es porque la justicia aun no concluye la indagatoria.
‘El exmandatario está siendo investigado por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) por presunto desvío de recursos en el ejercicio de su gubernatura, toda vez que es señalado por un desfalco de entre 50 mil millones de pesos y 60 mil millones de pesos. El “pellizco” al presupuesto sería en los presupuestos asignados a seguridad pública y el sector salud y económico.
Se sabe que las investigaciones de la UIF derivaron en denuncias ante la Fiscalía General de la República (FGR), quien está armando la carpeta de investigación.
No obstante, el hecho de que no haya sido citado a declarar como indiciado el perredista, no significa que sea inocente de los desvíos, como aventura el líder solaztequista Jesús Zambrano.
Lo que es un hecho, confían fuentes del PRD a Grupo Cantón, es que Silvano Aureoles es despreciado hasta en su propio instituto político, y una vez que detone la indagatoria en su contra, “se hará la víctima y se dirá perseguido político del régimen”.
Ahondan: “Silvano sabe que en cualquier momento pueden girarle una orden de aprehensión, por eso busca ‘simpatizantes’ a su candidatura inventada, y anuncia una gira en donde sabe perfectamente que le irá mal, pues su reputación no es buena y no tiene ninguna posibilidad de ser candidato; lo que busca es impunidad”.
Las mismas fuentes internas del PRD aseguran que Aureoles Conejo prepara un escenario para victimizarse, y desde ahora se está moviendo para buscar alianzas políticas no para una candidatura, sino para que lo protejan.
VÍNCULOS Y NEGOCIOS CON ROBERTO MADRAZO
Cuando los políticos hacen negocios, no importan los colores partidistas. Así lo demostró el perredista Silvano Aureoles, quien cuando fue gobernador de Michoacán hizo muchas compras de medicamentos con empresas vinculadas al priísta tabasqueño Roberto Madrazo Pintado, con lo cual hicieron un negocio redondo.
Una muestra de que los políticos que hacen negocios son incoloros, lo es también el diputado tabasqueño Gerardo Gaudiano Rovirosa –nieto del exgobernador de Tabasco Leandro Rovirosa, ya fallecido–, quien ahora es parte de Movimiento Ciudadano y pertenece a este círculo madracista.
Parte de este cerrado grupo fundó la plataforma informativa Latinus, donde figuran familiares de Roberto Madrazo, el entonces secretario privado de Silvano Aureoles y Patricia Olamendi –otrora subsecretaria de Relaciones Exteriores en el sexenio de Fox–, de acuerdo a una investigación periodística.
En su momento, el mismo presidente López Obrador señaló que “sí tenía información” sobre quiénes estaban detrás de dicha empresa. AMLO aseveró que su función no era denunciarlos, y se manifestó a favor de las libertades y porque “la vida pública sea cada vez más pública” y que no exista censura.
La investigación periodística reveló que detrás de Latinus, “hay un amasijo de políticos y empresarios” que incluye a la exsubsecretaria Patricia Olamendi; a su hijo, Miguel Alonso, y al secretario privado del gobernador Silvano Aureoles, Marco Antonio Estrada Castilleja.
También se anotó que quienes detentan el poder de esta plataforma son Federico Madrazo Rojas y Alexis Nickin Gaxiola, hijo y yerno de Roberto Madrazo Pintado.
Así es la cercanía de Aureoles y Madrazo, por eso el tabasqueño ahora asesora políticamente al michoacano…
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#México | El perredista, al saber que le girarán orden de aprehensión por el quebranto que dejó como gobernador, busca alianzas y se declarará “perseguido del régimen.https://t.co/SGkTGXuF3X
— Campeche HOY (@CampecheHOYmx) 10 de octubre de 2022
