En el Senado, cavan la tumba de Alito

MÉXICO.- La suerte de Alejandro Alito Moreno Cárdenas pende de la votación en el Senado de la República sobre su propuesta de ampliar la presencia del Ejército en las calles para labores de seguridad.

Si la iniciativa pasa en la Cámara Alta, sería la tumba de Alito en el tricolor, pues los senadores del PRI expresaron su rechazo a la misma desde que fue aprobada en la Cámara de Diputados, y adelantaron que votarán en contra.

Por lo pronto, anoche, las Comisiones de Puntos Constitucionales y Estudios Legislativos Segunda en el Senado aprobaron el proyecto que busca ampliar hasta 2028 las tareas del Ejército en seguridad pública, propuesta qué, dicho sea de paso, cuenta con el aval de Morena y sus aliados.

Con 18 votos a favor, 10 en contra y una abstención, se avaló la minuta, que ahora se remitirá al Pleno del Senado para su discusión, y se prevé que a más tardar el miércoles 21 de septiembre se vote en el pleno.

Pese a que el dictamen de la Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados contemplaba que el Ejército se mantuviera hasta 2029, durante la discusión en lo particular se admitió una modificación para acortar un año dicho plazo.

Justamente la propuesta del PRI –avalada y alentada por Alito– para ampliar la presencia del Ejército en las calles, fue la gota que derramó el vaso en la alianza Va por México, y el PAN y el PRD decidieron dejar la coalición en pausa, ante lo que llamaron una traición del líder nacional del tricolor.

Pero no solo eso, sino que también gran parte de los senadores del PRI se inconformaron, y adelantaron que votarían en contra de dicha iniciativa, al no ser consultados y estar en contra de dicha propuesta, al tiempo de acelerar gestiones para que Alito deje la dirigencia del partido.

Es decir, que la propuesta legislativa de Alito significaría la fractura definitiva no solo con el PAN y el PRD, sino también con grupos de poder del PRI.

Se apruebe o no la propuesta, será la tumba de Alito…

ENTÉRATE

Aunque en comisiones Morena y sus aliados son mayoría, en el pleno sólo cuentan  con 75 de los 86 votos que se requieren para aprobar una reforma constitucional, o sea, dos terceras partes de los senadores presentes en la sesión, por lo que deben convencer a 11 opositores.

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