La muerte de un niño de tres años que se quedó atrapado en la lavadora mientras jugaba con su hermano ha conmocionado a la comunidad de Lake Como, en Estados Unidos.
El hecho se produjo el pasado 4 de agosto, luego de que el menor de edad sufriera asfixia tras cerrarse la tapa frontal de la lavadora. Hasta el momento las autoridades desconocen si fue su hermano quien lo dejó allí o la misma víctima cerró la tapa durante su juego.
“Les pedimos a los padres que hablen con sus hijos y les enseñen que las lavadoras, secadoras y otros electrodomésticos no son juguetes y no deben jugar con ellos”, indicó el portavoz del Departamento de Policía del lugar.
Lo cierto es que cuando sus padres notaron la ausencia del niño y corrieron a buscarlo, los intentos de reanimarlo ya no dieron resultados. Este ya había perdido la vida dentro del aparato electrodoméstico.
Los servicios de emergencia lo declararon muerto por asfixia y el Departamento de Policía de Orlando abrió una investigación al respecto para determinar cuánto tiempo pasó encerrado, pero sobre todo si realmente se trató de un accidente.
