Desde antes de asumir el gobierno y durante los siete meses que van de éste, el Presidente López Obrador ha sostenido su estrategia de “punto final” para garantizar la gobernabilidad del país. Por eso no ha promovido enjuiciar a ninguno de los expresidentes de la etapa neoliberal.
Aunque Carlos Salinas, Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña, en diferentes temas, se han dedicado a sabotear su Gobierno.
Sobre ésto, López Obrador dijo ayer en su gira por Chiapas, que los expresidentes andan molestos porque, entre otras cosas, les quitó la pensión millonaria que gozaban.
El miércoles pasado se suscitó una protesta de Policías Federales; ese mismo día, el titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, acusó que un grupo de policías solicitó que su representante legal para este movimiento fuera Felipe Calderón.
Este de inmediato salió a negar el hecho y defendió a la corporación, que asegura Obrador, se echó a perder con mayor énfasis con Peña Nieto. No hace falta probar ello, dijo el primer mandatario, es de dominio público.
En este tema de la Policía Federal, otro molesto es Enrique Peña, porque va a perder los contratos de la empresa Cuerpos de Seguridad Auxiliares del Estado de México (Cusaem), para cuidar las instalaciones del Gobierno Federal. Con Peña, la empresa recibió contratos por unos 8 mil millones de pesos al año.
Otra molestia que abarca a los cuatro expresidentes citados, es la cancelación del aeropuerto de Texcoco, porque ahí tenían los cuatro ya negocios apalabrados.
El caso de Carlos Salinas de Gortari tiene una vertiente más, su estrategia de obstrucción al gobierno de Obrador: es el cerebro de la creación de la “Resistencia a la 4T”, cuyo más destacado operador es el empresario Claudio X. González, quien patrocina un grupo de intereses que disfraza como una supuesta causa contra la corrupción.
Con mucho menos poder, Vicente Fox también quiere hacer tropezar al gobierno de López Obrador. Aunque sólo le alcanza para hacerlo en redes sociales, porque hasta de las marchas lo corren.
