CALKINÍ. Trabajos de último momento son el resultado de la desesperación del actual alcalde de Calkiní, para justificar los miles de pesos que se llevará y con los cuales dejará endeudado al municipio, y es que José Canul Aké pretende dejar inconclusos las obras licitadas recientemente, cuando durante su administración no movió ningún dedo por los ciudadanos.
Y es que sin previo aviso a los habitantes de esta, se les dejó sin el servicio de agua potable a toda esta cabecera municipal, tratando de hacer al “vapor” lo que no hicieron en tres años.
Pobladores señalaron que la obras que se encuentran realizando en la calle 15 rumbo a Nunkiní, cerca del barrio de San Luis Obispo, es el miedo que tiene el edil ex morenista, pues a su salida el próximo gobierno municipal auditará peso por peso lo que este se llevó, para hacerlo pagar en caso de que las irregularidades dentro de la Comuna sean excesivas.
