Vecinos de las colonias Caracol, Emiliano Zapata Y Miguel de la Madrid, denunciaron que desde hace más de dos semanas, se encuentran sin una gota de agua potable, pese a las múltiples quejas que han realizado ante el Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Carmen (SMAPAC).
Coincidieron que en la administración el bombeo del líquido para los habitantes de esta zona es limitado, pues desde las 9 de la mañana hasta las cinco de la tarde se suministra de agua, por lo que, pidieron al director de la paramunicipal, Roberto Figueroa Rueda, cambiar a los trabajadores que se encargan de manejar las válvulas en la estación, ubicada sobre la Avenida Satélite por 16 de Septiembre.
A su vez recriminaron las acciones del alcalde Pablo Gutiérrez Lazarus, quien en sus tres años de administración nunca cumplió con su promesa de campaña, de dotar estas colonias con el vital líquido y que además en vez que se preocupe por cuidar de la ciudad, se preocupa más por buscar una reelección que jamás llegará.
“Nunca se vino a parar ese señor a estas calles durante sus tres años de gobierno y nosotros vivimos con muchísimas carencias, nuestro problema de agua no es de ahorita, es de años y se vino a empeorar con este presidente que nunca hizo nada por nosotros y ahora pretende ser presidente de nuevo, cree que votaremos por el para que nos vaya mucho peor”, dijeron.
Explicaron que muchas veces han denunciado esta situación pero que las autoridades realizan caso omiso, por lo que exigen que se les brinde un mejor servicio y que se aumente el horario para poder llenar agua potable.
“Denunciamos, una vez un grupo de vecinos fuimos al Agua Potable y lo único que nos dijeron es que no se podía hacer nada porque no había presupuesto y las bombas gastaban mucha corriente, qué le hacen entonces a todos nuestros impuestos, si según no hay dinero. Nosotros lo único que queremos es agua potable a toda hora, porque es nuestro derecho para eso pagamos”, comentaron.
Así también explicaron que mucha del agua con la que lavan ropa y se bañan es procedente de los pozos con los que algunos de los vecinos cuentan, pues no muchos logran llenar sus contenedores.
