Fueron rescatados cuatro excursionistas americanos que se accidentaron el pasado sábado al intentar escalar el Citlaltépetl o Pico de Orizaba, la montaña más grande del territorio nacional, en donde también fueron auxiliados dos alpinistas guatemaltecos, pero por la zona veracruzana.
Luego de sobrevuelos realizados por la Secretaría de Marina (Semar) para dar con la ubicación de los alpinistas, durante la noche se logró el primer rescate, vía terrestre, de dos de los extranjeros quienes, por propios medios, se trasladaron a la Ciudad de México.
Norteamericanos accidentados en #Citlaltépetl, 2 rescatados en la noche por propios medios se trasladan a #CDMX, 2 hoy los rescata #SEMAR y #Suma traslada a nosocomio en #Puebla. Falta un quinto hombre que solo puede ser rescatado por tierra y está en ello Rescate Alpino de Méx.
— PC Estatal Puebla (@PC_Estatal) 26 de noviembre de 2017
Durante las primeras horas de este domingo dos alpinistas más fueron bajados a la cabecera municipal de Tlachichuca y personal de la Secretaría de Seguridad Pública, así como del Sistema de Urgencias Médicas Avanzadas (SUMA), los trasladaron a nosocomios de Puebla capital para brindarles atención necesaria tras las contusiones que presentaron.
Según un comunicado oficial de la Dirección General de Protección Civil Estatal, en estos momentos, con apoyo del Grupo de Rescate Alpino de México, se trabaja en el descenso del quinto miembro y de uno de los rescatistas que habría sufrido una caída.
Así el elemento de #Protección #Civil #Municipal, quien cayó esta madrugada en una barranca del #Citlaltépetl cuando desempeñaba actividades laborales. YA SE ENCUENTRA RESCATADO. pic.twitter.com/Zc3uea7iEX
— PC Estatal Puebla (@PC_Estatal) 24 de noviembre de 2017
En otra zona del volcán, los equipos de rescate colaboran en el descenso de dos alpinistas guatemaltecos independientes del primer grupo, que habrían intentado subir por una ruta diferente.
Los gobiernos de los estados de Puebla y Veracruz, así como la Secretaría de la Defensa Nacional, activarán un protocolo de revisión en los accesos al Citlaltépetl para evitar que grupos, sin equipo ni experiencia suficiente, asciendan a la montaña y pongan en riesgo su vida, luego de que las condiciones climatológicas de las últimas semanas no han sido favorables para realizar ascensos.