Un cráter interno de 370 metros de diámetro por 110 metros de profundidad fue detectado en el cráter del volcán Popocatépetl; fenómeno producido por la actividad interna de los últimos días.
De acuerdo con el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), la actividad de los últimos días en el coloso, desencadenó que no exista un domo, situación que facilita la salida de emisiones.
Tras un sobrevuelo realizado con apoyo de la Policía Federal, los investigadores del Cenapred detectaron la presencia del cráter interior del coloso ubicado en los límites de Puebla, Estado de México y Morelos, lo cual, establece un “sistema abierto”.
“A partir de las observaciones realizadas durante este sobrevuelo, se pudo determinar que la actividad explosiva registrada en días pasados, hizo que el cráter interno aumentara sus dimensiones, alcanzando un diámetro de 370 metros y una profundidad de 110 metros.
“Es posible que en los próximos días o semanas continúe el aporte de material nuevo hacia la superficie, como ha ocurrido en semanas previas y que, gradualmente, el cráter interno sea rellenado, al menos de manera parcial, por un nuevo domo de lava”, informó al Cenapred.
El Cenapred exhortó a la población a no acercarse al volcán y sobre todo al cráter, por el peligro que implica la caída de fragmentos balísticos y en caso de lluvias fuertes alejarse de los fondos de barrancas por el peligro de deslaves y flujos de lodo.
Tras 719 exhalaciones cae ceniza en Valle de Atlixco Por otra parte, una capa de ceniza cubrió al Valle de Atlixco en Puebla tras 719 exhalaciones de baja intensidad acompañadas de vapor de agua y gas; siete explosiones y dos sismos en el volcán Popocatépetl.
El Semáforo de Alerta Volcánica del Popocatépetl se encuentra en Amarillo Fase 2, informó el Cenapred.
Por la mañana del sábado, el volcán Popocatépetl emitió una fumarola de dos kilómetros en dirección al sur-oeste.
Ante la caída de ceniza en las zonas aledañas, el Cenapred recomendó a la población proteger nariz y boca con un pañuelo húmedo o cubreboca, así como limpiar ojos y garganta con agua.
Además, utilizar lentes de armazón y evitar los de contacto, para reducir la irritación ocular; tapar tinacos y otros depósitos de agua, para que no se ensucien; cubrir coladeras de patios y azoteas, así como aparatos, equipos y automóviles, a fin de que no se deterioren o rayen.
También se sugiere retirar constantemente la ceniza de techos de lámina, cartón, triplay, lona y materiales parecidos, para evitar su acumulación.
Con información de Milenio