Un empresario de Turquía sentenciado en su país por la quiebra fraudulenta de un banco, es buscado por la PGR por un caso de supuesto tráfico de joyas y diamantes.
Las alhajas, valuadas en más de 185 millones de pesos, estaban a la venta en locales comerciales de Cancún.
En una bóveda, la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) mantiene asegurados 4 mil 569 diamantes, piedras preciosas y semipreciosas que se presume fueron introducidas al país de contrabando por Apel Celik, de acuerdo con documentos judiciales y ministeriales.
El Servicio de Administración Tributaria (SAT) ha estimado que el presunto contrabando de Celik ocasionó un daño al Fisco de más de 30 millones de pesos y, por consecuencia, le han fincado créditos fiscales a él y sus empresas por más de 357 millones de pesos.
El año pasado, el Juzgado Séptimo de Distrito en Quintana Roo ordenó la aprehensión del ex banquero por los delitos de contrabando y defraudación fiscal, esta última por un monto de 1 millón 458 mil 535 pesos, por omitir el pago del Impuesto sobre la Renta (ISR) en 2011. Sin embargo, recientemente logró que le cancelaran el delito de contrabando, pero no el supuesto fraude al Fisco.
Con información de Agencia Reforma.