El titular de la Profeco delegación Carmen, Alan Robert Hernández González, señaló que dicho programa ocasiona en los comercios una gran afluencia de consumidores, que acuden por los llamativos descuentos que anuncian los comerciantes con la intención que las personas adquirieran su mercancía a un menor precio, para mejorar sus ventas.
Sin embargo, debido a que no todas las personas obtienen el beneficio que aplica el Gobierno Federal de adelantar una parte del aguinaldo a los trabajadores, las casas de empeño tienen gran demanda de pignorantes, que acuden a empeñar sus pertenencias para obtener efectivo y aprovechar las ofertas del “Buen Fin”.
Esta situación es aprovechada por los encargados o gerentes de estos establecimientos, para tratar de obtener mayores intereses por el empeño de sus artículos o al momento de refrendarlos, como ha sucedido en años anteriores donde se han tenido quejas.
Por ello, explicó que en la revisión que realiza la Profeco a dichos negocios, se verifica que cuenten con el registro de sus contratos ante la dependencia y que cumplan con las disposiciones a nivel nacional.