El pasado 29 de septiembre, Israel Hernández, quien estudiaba Derecho, departía con amigos en el bar Áttico cuando se dio cuenta que un sujeto maltrataba a una mujer. Al enfrentar al abusador, éste sacó un arma de entre sus ropas y le disparó y lo pateó en dos ocasiones.
El asesinato de Israel Hernández, un estudiante de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) en un bar de Cuernavaca provocó un nuevo enfrentamiento entre el alcalde Cuauhtémoc Blanco Bravo y el gobierno de Graco Ramírez por la falta de seguridad en el municipio.
De acuerdo con las cámaras de seguridad del antro, ubicado en la avenida San Diego, se observa como otro sujeto, presuntamente personal de seguridad del bar, permitió la evasión del agresor.
El video circuló en redes sociales desde el viernes 13 y pese a que la agresión ocurrió hace 20 días y la Fiscalía General de Justicia del Estado tiene identificado al homicida, no lo ha detenido.
Sin embargo, el pasado fin de semana el fiscal Javier Pérez Durón culpó al ayuntamiento de Cuernavaca de permitir “la operación irregular de antros donde ingresan menores de edad con armas y sin ningún control”.
Y agregó: “Las autoridades del municipio de Cuernavaca deben frenar de manera inmediata la expedición de licencias de funcionamiento a todos los establecimientos comerciales, que no cumplan con los lineamientos”.
En respuesta, Blanco Bravo advirtió que la prevención de los delitos en la capital del estado “está en manos de la Comisión Estatal de Seguridad, del gobierno del estado, a través de la Policía del Mando Único”.