Las demoliciones de los edificios que resultaron con daños estructurales por el sismo del 19 de septiembre se extenderán hasta fin de año, confirmó el secretario de Obras, Edgar Tungüí.
Aclaró que los trabajos de desmantelamiento serán a mano y será hasta la próxima semana cuando se use maquinaria, sólo en los casos en los que el espacio así lo permita.
En Génova 33, en la Zona Rosa, trabajadores de la Secretaría de Obras ya inspeccionaron la estructura de la escalera para determinar su estabilidad y pueda ingresar personal de trabajo.
La Comisión Federal de Electricidad (CFE) retiró la acometida eléctrica del edificio de 10 pisos, a la par que 10 trabajadores limpiaron los escombros que se encontraban en la escalera principal.
EN CONTEXTO
En los próximos días se hará el apuntalamiento de la escalera, ya que será el acceso durante la demolición, mientras que siguen los estudios topográficos.
Además se pondrá un tapial para asegurar el lugar y se desalojará el equipamiento y muebles d ella planta baja del edificios para permitir el ingreso y salida de materiales para la obra.
En Concepción Béistegui 1503, en la Narvarte, cinco especialistas iniciaron los estudios topográficos, además de que se colocaron marcas en el inmueble para determinar su verticalidad y decidir el punto de inicio de los trabajos.
Con ayuda de dos grúas y cuatro técnicos, la CFE comenzó la poda de árboles para liberar el cableado y retirar la línea de mediana y baja tensión.
Procedimiento
El primer paso después de tener los estudios topográficos y la hoja de ruta, será iniciar con el desmantelamiento de elementos de cancelería, puertas, vidrios, menaje y fachada.
Posteriormente se procederá con el desarticulado de la estructura como losas, columnas, vigas; en este punto será cuando puedan intervenir las máquinas para acelerar el desmantelamiento.
En todos los casos se cuidarán las instalaciones de gas, para no provocar riesgos durante las maniobras de demolición.
Además, subrayó el secretario de Obras, la demolición a mano será paulatina para evitar poner en riesgo a los trabajadores, a los peatones y a los inmuebles aledaños.
Costos
Tungüí Rodríguez precisó que en los edificios de Génova 33 y Concepción Béistegui 1503 los costos – de los que no dio detalle- correrán de manera inicial a cargo de la Secretaría de Obras.
Sin embargo, añadió, se buscará fincar un crédito fiscal para que posteriormente el Gobierno pueda cobrar a los particulares las erogaciones realizadas.
En el caso del edificio de San Antonio Abad 122 -que albergaba oficinas del Gobierno de la Ciudad de México- será el propietario quien se haga cargo de los gastos de la demolición.
Con información de Publimetro
