La primera información que se tuvo en torno a estos hechos, es que se había encontrado el cuerpo encobijado de una persona desconocida en las inmediaciones del ejido Justicia Social, a orillas de la cinta asfáltica, lo cual sólo parcialmente fue verdad, ya que no se trataba de un hombre sino de un bebé.
Tal como reportaron, el frágil cuerpo sin vida de ese neonato se hallaba envuelto por dos cobijas, lo cual fue reportado vía telefónica a la Dirección de Seguridad Pública y a la Vicefiscalía General Regional por el comisario de Justicia Social, tras ser la primera autoridad en corroborar el hecho.
Al sitio arribaron socorristas de la Cruz Roja Mexicana para revisar la condición del recién nacido, pero solamente confirmaron lo que ya se sabía, que no tenía signos vitales, por lo que correspondió al personal del Servicio Médico Forense levantar el pequeño cadáver para trasladarlo al anfiteatro municipal.
El pequeño, al que de acuerdo con la hipótesis de la policía alguna mujer desconocida habría abortado, tendrá que ir directo a la fosa común porque no hay manera de identificársele.