El sismo económico que ha venido sufriendo Tabasco desde finales del 2014, a raíz de la crisis del petróleo, continúa causando estragos entre la población, principalmente en el renglón de atención a la salud, servicios y alimentación.
Esta debacle no sólo se refleja en la pérdida del empleo y del ingreso económico, sino también en la seguridad social, donde unas 99 personas por día perdieron ese derecho en los últimos 33 meses.
Cifras del Informes Estadístico de la Consulta Dinámica o Cubo de Información del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), señalan que de noviembre 2014 a julio de este año, casi 100 mil personas, de 0 a 85 años perdieron el derecho a la atención médica gratuita por parte de ese organismo.
La causa: La baja en el IMSS de trabajadores en ese mismo período de tiempo, base de la afiliación de las familias.
Los indicadores señalan que al penúltimo mes del 2014 habían registrados como trabajadores formales un total de 203 mil 601 personas del estado, y para julio 2017 esa cantidad bajó a 170 mil 075; es decir, se marca como despido o baja de las empresas, que conllevó a la pérdida del registro en el Seguro, de un total de 33 mil 526 empleados.
El Cubo de Información describe que esta situación no sólo golpeó al derechohabiente, sino también a sus familias.
Destaca que mientras al cierre de noviembre del 2014 había un total de 742 mil 141 tabasqueños con derecho a los servicios médicos, para el séptimo mes de 2017 el registro descendió a 646 mil 280, un recorte de 95 mil 861, equivalente al 14.83 por ciento. De ese total, 39 mil 758 son mujeres y 56 mil 103 hombres.
Con esta medida perdieron todos los derechos del IMSS, como servicios de medicina general, de urgencias, de alta especialidad, atención hospitalaria, así como los de guarderías, centros deportivos, entre otros.
Además, el derecho a una vivienda vía crédito del Infonavit, en caso de no haber obtenido ya alguno.
Esta situación ha causado la saturación de servicios de hospitales públicos, como el Juan Graham, el Rovirosa, los centros de salud comunitarios, así como los consultorios de farmacias, donde el servicio es gratuito o con pagos de 30 a 50 pesos.
'Tuve que recurrir al Seguro Popular'
TESTIMONIO
Antonio Hernández. Desempleado.
Ante los recortes laborales que han dejado a miles de tabasqueños sin acceso a los servicios de salud y de seguridad social por parte del IMSS, muchos se han visto obligados a buscar la atención del Seguro Popular.
"Tenía IMSS, pero me dieron de baja y tenía que operarme de la vesícula, por lo que en el Seguro Popular me atendieron", dijo Antonio Hernández Gómez, ex empleado de una compañía petrolera.
Dijo que todos los medicamentos y radiografías corrieron por su parte, que finalmente fue el gasto mayor, por lo que tuvo que vender su automóvil.
"Cuando trabajaba no había problemas, íbamos a consulta normal al Seguro; ahorita afortunadamente no se han enfermado ni mi esposa ni mis hijos, pero cuando requieran ir al médico, pues tendrán que utilizar igual el Seguro Popular", aseguró.
(Con información de Mariel Arroyo).
'La mitad de lo que gano se va en medicinas'.
TESTIMONIO
César Félix. Desempleado.
"Estaba empleado, tenía Seguro Social y tenía controlada mi diabetes con los medicamentos que me daban con regularidad", señala César Félix García.
Perdió su trabajo por culpa de la crisis del petróleo, y con ello le dieron de baja del IMSS y al mismo tiempo su esposa y sus tres hijos se quedaron sin los servicios médicos.
"Hoy tengo trabajo de taxista y aquí no tengo IMSS, por lo que tuve que tramitar el Seguro Popular para poder seguir haciendo frente a la diabetes, dijo.
"La mitad de lo que gano se va en gastos de medicinas, por eso tengo que trabajar hasta doble turno", dijo preocupado.
Además, señaló que si tiene alguna recaída tiene que pagar la consulta con médico particular, porque ha habido ocasiones que no lo atienden pronto en el Juan Graham o algún centro de salud.
(Con información de Mariel Arroyo).