José Domingo Pérez Vázquez, gerente general del rastro, explicó que para los judíos es requisito indispensable que se realice la ceremonia de la bendición Kosher, puesto que con ello se les garantiza que esa empresa cumple con las normas de calidad e higiene a nivel internacional.
El clérigo hebreo se dirigió a la sala de producción, supervisó las instalaciones y los procedimientos de sacrificio, el manejo de calidad y las garantías sanitarias que son imprescindibles para que se realice la bendición Kosher, con la cual se garantiza a la comunidad judía a la que se surtirán esas 600 toneladas de carne, que es “apta” para el consumo humano.
Se recibió al ganado en los corrales para proceder al baño ante morten y posteriormente se le ingresó al área de sacrificio, donde el Rabino Rafael David Suued hizo un corte en el cuello del semoviente que se utilizó para la ceremonia y realizó otros cortes en la décima costilla del animal, como parte del ritual judío.
Una vez realizada esta ceremonia, la empresa escarceguense arrancó formalmente la comercialización internacional de sus productos a la comunidad judía de Estados Unidos de Norteamérica, ya que tras la remodelación que se hizo al rastro se cumplieron con las normas de calidad e higiene que se exigen internacionalmente, y que se podrán estar sacrificando mil 200 reses semanalmente para abastecer a esos clientes.
La producción de carne para surtir a la comunidad judía de Estados Unidos arrancó ayer de manera oficial.