El secretario de Educación Pública (SEP), Aurelio Nuño Mayer, informó que de acuerdo con los registros oficiales, 10,000 escuelas tienen algún tipo de daño en las entidades afectadas por los sismos del 7 y 19 de septiembre pasados, y 400 de ellas serán reconstruidas.
En la ceremonia de reinicio de clases después de los sucesos trágicos en la capital del país a consecuencia de los temblores, dijo que este lunes volvieron a la vida normal, 103 escuelas de la Ciudad de México.
Ante alumnos de la Escuela Secundaria 263, Deporte para Todos, se recordó con un minuto de silencio a quienes fallecieron por los sismos. Dijo que se retorna a la normalidad, y que se trabaja con 60 brigadas para determinar la seguridad de las escuelas de la ciudad, para que todas estén en condiciones de reanudar labores.
Indicó que diariamente se informará a través de la página web y redes sociales de la SEP sobre las escuelas que ya cuenten con su dictamen de seguridad estructural, y que regresarán a clases al día siguiente.
Ratificó que escuelas que no cuenten con el dictamen de seguridad estructural no podrán regresar a clases, porque lo más importante es la seguridad de maestros y alumnos, lo que además da tranquilidad a los padres de familia.
El encargado de la política educativa del país reconoció el comportamiento ejemplar de los maestros, quienes durante el sismo guardaron la calma y siguieron los protocolos para apoyar a los alumnos.
Nuño Mayer también hizo un reconocimiento al trabajo y apoyo de las Fuerzas Armadas y a la población civil, y señaló que cuando hay unión, la fuerza de los mexicanos puede derrotar cualquier obstáculo.
Insistió en que con la fuerza de los mexicanos y de las Fuerzas Armadas, México seguirá adelante; México está de pie.
En esta visita escolar, el secretario estuvo a acompañado por EL contralmirante, Juan Carlos Vera Salinas, director general adjunto de Bienestar y Seguridad Social de la Secretaria de Marina, y el mayor Gustavo Ricardo Vallejo Suárez, director de la Escuela Militar de Ingenieros.
Explicaron los apoyos que se están ofreciendo a través del Plan Marina, con el que se atiende a la población civil en materia de prevención y atención durante y después del desastre, así como los lineamientos del Plan DN-III-E, de apoyo a la población en casos de desastre.
Nuño Mayer recordó que también en los estados de México, Oaxaca, Chiapas, Guerrero, Puebla, Tlaxcala y Michoacán, planteles que están certificados con la seguridad de las infraestructuras, avalados por los gobiernos locales y la SEP también reiniciaron clases.
Reconoció que aunque este temblor fue muy fuerte y azotó duramente a la capital y a Morelos, así como algunos municipios en Puebla, fue diferente y con menores daños que en el sismo del 19 de septiembre de 1985.
Destacó que lo que se aprendió del temblor de 1985, sin duda funcionó, "evidentemente en este temblor (2017) tuvimos pérdidas, tuvimos daños, pero no son comparables con lo que pasó en 1985, por diversos motivos".
Añadió que esto tiene que ver con las lecciones que se aprendieron, como es que la Ciudad está mejor construida y hayan nuevos reglamentos en la materia, y porque se puso más énfasis en cómo se debe de construir.
Dijo que eso se demostró, porque comparar un temblor con otro, resultaron mucho menos los edificios que tuvieron algún problema, en términos del universo que se afectó en la Ciudad que representa uno por ciento.
También se ha avanzado en materia de protección civil, pues en 1985 no existía esta cultural, y ahora ya se cuentan con tecnologías como es la alarma sísmica y se hacen simulacros. Les dijo a los niños que los simulacros aunque a veces no se toman tan en serio, hoy se demostró que si funcionan.
Agregó que de este tiempo vamos a sacar también muy buenas lecciones, y lo que es muy claro ahora es que hemos mejorado mucho todos como sociedad, en saber cómo enfrentar retos de la naturaleza.
Con información de El Economista
