Luego de buscar atención médica en tres clínicas públicas sin éxito, Hugo Hernández tuvo que juntar 3 mil 800 pesos para que su esposa, quien resultó con las piernas fracturadas tras el sismo, fuera atendida en una clínica privada.
Seis horas después del percance, el originario de Nezahualcóyotl logró que atendieran a Virginia Jasso, de 54 años; sin embargo, por operarla le cobraban 60 mil pesos.
"Mi esposa se lesionó sus piernas porque se le cayó una barda. Tenía el hueso suelto de la pierna izquierda, y en la derecha se le astilló el hueso", relata el señor.
"La llevamos a la Clínica 25 del IMSS, por avenida Zaragoza, pero no la atendieron porque los pacientes estaban evacuados", dijo.
"Nos mandaron de la Clínica 25 a la 120, pero ahí no había luz, y se requería que le hicieran una placa a mi esposa para ver la gravedad".
Regresaron al Municipio de Nezahualcóyotl, donde viven, para acudir a una clínica La Perla. Ahí atienden a personas sin derechohabiencia, pero no los atendieron.
Les sugirieron trasladarla al Hospital de Trauma y Ortopedia Magdalena de las Salinas, en donde finalmente fue atendida.
A este hospital también llegó Lourdes Flores, quien llevaba más de 18 horas buscando a su sobrina Blanca Estela Padilla, la cual sufrió severas quemaduras luego de que explotara su casa tras el sismo.
"La trasladaron a ella y a sus niños a la Clínica 32 del IMSS en Calzada de las Bombas, pero a las 5 de la tarde se los llevaron a otros hospitales porque sus quemaduras eran graves. No sabemos dónde está ella", contó Lourdes Flores, tía de la joven de 24 años.
Más tarde se dirigió al Centro Médico Siglo 21, donde le dijeron que estaba su sobrina.
Con información de Agencia Reforma.