Entrevistados ayer, locatarios como la señora Rosario Chan aseguraron que durante meses no recibieron atención y los enormes hoyancos que había en la calle que pasa por esa área generaban bajas ventas, sin embargo, hoy ya están contentos de nuevo, pues les han respondido.
Señalaron que a raíz de la reparación de los enormes baches, las ventas han subido, por lo que ahora los campechanos ya pueden pasear por el área y comprar con tranquilidad y seguridad, no como antes, que temían resbalar entre el agua sucia.
Los usuarios de trasporte público también pueden abordar con comodidad las unidades que van a las colonias como Malagón, Villacabra, entre otras, pues el paradero ya fue resanado y no corren peligro de ser salpicados por aguas sucias.
Tanto comerciantes como usuarios ya se encuentran un poco tranquilos en espera de su unidad, y por lo menos logran llegar limpios y sin ningún resbalón a su destino.
Por último, la ciudadanía exhortó a las autoridades a seguir atendiendo el principal centro de abasto, pues los baches no son el único problema, también hay otras necesidades que deben ser tomadas en cuenta.